lunes, 18 de julio de 2011

El pene de la iguana

Andaba yo quemando unos minutillos de la tarde noche, ese bonito y romántico periodo de tiempo que va desde que mi media naranja entra en la cocina a preparar la cena hasta la cena mismamente; revisando mi cuenta de correo de hotmail (bandeja de entrada igual a cero) y echando un vistazo a los comentarios (gracias Amenofis por evitarme el segundo suspenso) que suscitan mis interesantes entradas en Mi Pasado. Como el tema estaba siguiendo caminos paralelos al ecosistema del Sahara (o sea, desierto), me he dispuesto a probar suerte en un grupo que tengo a medias con unos colegas en Yahoo. Y en el apartado Yahoo noticias me he topado con una que me ha provocado un escalofrío que ha recorrido mi espinazo, desde la polla hasta el cerebelo:

Una iguana podría perder el pene por una erección permanente BRUSELAS (Reuters) - Mozart, una iguana con una erección permanente desde hace seis días después de una sesión de apareamiento en un zoológico belga, podría sufrir la amputación del pene si su estado no mejora. "Verá al veterinario el jueves", dijo Enid Balemans, portavoz del Zoo Aquatopia en Amberes, añadiendo que los veterinarios están considerando tratamientos alternativos. Aunque se le ampute el pene, Mozart podría reproducirse porque las iguanas macho tienen dos penes, añadió Balemans. La portavoz dijo que el animal no está mostrando signos obvios de ansiedad, pero añadió: "Imagino que si eres hombre y estas como Mozart, duele".

Para empezar quiero hacer hincapié en el extraño sentido del humor del tipo que le pone los nombres a las iguanas. ¿Mozart? He buscado en Google información sobre Mozart y lo más cerca que estuvo de algo parecido a un animal fue el arzobispo de Salzburgo. A mi el primer nombre que se me ha venido a la cabeza para el bicho ha sido Nacho (joder, que el bicho este lleva empalmado seis días). O Rocco. Claro que como el animal tiene dos pollas, también podríamos llamarle Nachoco o Rococho. Pero ponerle Mozart a una iguana es de tan mal gusto como ponerle Sara Montiel a una momia…

Dos pollas. DOS. La iguana macho tiene dos pollas. Y nosotros, los hombres, creyendo que somos el ser perfecto. La obra cumbre de Dios. La raza dominante del planeta. El puto homo sapiens. Y la iguana, mientras le hacen las mamadas a pares, pensando: mucha evolución, mucha evolución, y con lo que os gusta el sexo a los humanos sólo tenéis una polla, pringaos. Yo no tengo muy claro el tema de la reencarnación y de si se puede elegir lo que quieres ser cuando estás delante de Dios y estas cosas, pero evidentemente que si puedo escoger me pido ser iguana. Dos pollas, joder!!! Si con una ya es divertido imaginaos con dos!!! Podríamos ser multiorgásmicos!!! Que suerte tienen las jodidas iguanas…

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